✓✓ Tirón de orejas a España por la contaminación Lumínica
Semana dura para España, en una investigación realizada por la Universidad de Exeter han determinado que España es el mayor foco de contaminación lumínica de la UE. Gastamos más de 1.000 millones de euros en iluminar nuestras ciudades pero lo estamos haciendo mal ya que hemos acabado con el hábitat de muchas especies de animales nocturnas y hemos privado a nuestros hijos de la visión de un cielo estrellado.
Hoy en Forjas Estilo os vamos a contar las medidas fundamentales para acabar con la contaminación lumínica que desde nuestro departamento de I+D+i llevamos desarrollando desde hace años.
Los efectos de la contaminación Lumínica
Nadie puede poner en duda el avance que supone el alumbrado público para las ciudades, sin embargo, tenemos que tomarnos en serio el problema de la contaminación lumínica puesto que se puede evitar sin necesidad de dejar sin alumbrado público nuestras ciudades.
Se define contaminación lumínica como el brillo de luz en el cielo nocturno producido por la reflexión y difusión de la luz artificial en los gases y partículas del aire. Esto sucede porque se envía la luz hacia el cielo en lugar de hacerlo a la calzada.
Algunos de los efectos de la contaminación lumínica son:
– Intrusión lumínica: la luz procedente del exterior se cuela en las casas y puede provocar problemas de salud por falta de sueño a los vecinos.
– Deslumbramiento: una luz artificial fuerte que incide directamente sobre el ojo puede provocar que la visión no puede adaptarse y se cause el famoso deslumbramiento. Este fenómeno además de ser muy desagradable y provocar inseguridad vial, es un despilfarro de dinero para las arcas municipales. Además supone un grave riesgo para la circulación, todos sabemos lo que sucede cuando pasamos de un lugar muy iluminado a otro más oscuro, nuestra pupila necesita un tiempo para adaptarse. Así, si pasamos de un tramo de carretera muy iluminado a otro escasamente iluminado podemos tener problemas de visión y por tanto aumenta nuestro riesgo de accidente.
– Aumento del consumo: la factura por alumbrado público exterior podría reducirse de un 25% a un 40% bajando la potencia de las luminarias y utilizando led.
– Destrucción del paisaje nocturno: con tanta iluminación exterior no podemos disfrutar del paisaje celeste y estamos privándonos de ver las estrellas. Esto hace que perdamos el interés por ellas y por su estudio. A lo largo de la historia han sido muchos los avances producidos a partir de la observación del cielo: descubrir nuevos territorios, explicar las estaciones del año y conocer las fechas exactas para las diferentes tareas del campo.
– Mayor índice de agresividad: se establece una conexión entre la iluminación con bombillas de vapor de mercurio (luz blanca) y el aumento de la agresividad.
– Alteraciones del sueño: una iluminación excesiva o inadecuada puede producir sueño inquieto, ausencia de reposo, insomnio, cansancio y nerviosismo.
– Modificaciones en el Hipocampo: exponerse a luz excesiva durante la noche (pantallas de ordenaror, móviles, tablets, televisiones) altera el ciclo luz-oscuridad llegando a causar depresión y aumentando la posibilidad de sufrir necrosis tumoral por las modificaciones del hipocampo.
¿Cómo seleccionar el alumbrado público para evitar la contaminación lumínica?
– Utilizar farolas apantalladas que tengan una bombilla horizontal. Por ejemplo, la luminaria Sira Led.
– Instalar las luminarias paralelas al suelo y no deja r nunca que el flujo luminoso suba hacía arriba, siempre hacia abajo.
– Restringir el horario de la iluminación ornamental, así como la iluminación de vallas y postes publicitarios.
– Prohibir los cañones de luz o láser o cualquier otra iluminación que envíe luz al cielo.
– Emplear rejillas antideslumbrantes.
– Reducir el consumo en horas de menor actividad bajando la tensión o haciendo un apagado selectivo de luminarias.
En Forjas tenemos soluciones para mejorar el alumbrado público para que la pérdida del sol no nos impida ver las estrellas.
