✓✓ Parques infantiles, mucho más que mobiliario urbano
No hay duda alguna, la arquitectura y el planteamiento de las ciudades puede ser clave en la marginación de la infancia. Ya lo anunciaba Collin Ward en su libro The Child in the City (El niño en la ciudad). En este libro se afirmaba que “los niños jugarán en la ciudad con cualquier cosa”.
Parques infantiles pensados para la infancia
Esta afirmación que ya hizo en 1931 el arquitecto y paisajista danés Carl Theodor Sorensens responde a una realidad que casi todos hemos vivenciado. ¿Quién no recuerda en su infancia una cañería de obra que se convertían en el refugio de nuestro grupo, en nuestro pabellón olímpico donde realizábamos los ejercicios más arriesgados y en nuestra casita de muñecas? Analizando, por tanto, el comportamiento de la infancia parece claro que los parques infantiles y sus estructuras de juego no deben tener una actividad predeterminada que deba suceder sino que es necesario dejar a la creatividad del niño actuar. Con esta premisa el equipamiento de los parques infantiles debe ser polivalente, seguro y ofrecer a los niños y niñas tantas opciones como su imaginación pueda crear.
Al hilo de esto, cuando estamos planeando diseñar parques infantiles hay que ahondar en el movimiento global de ciudades amigas de la infancial (child friendly cities) y observar todos sus avances: clubes de mapeo de Humara Bachpan en Indica, talleres de arquitectura y urbanismo para niñas y niños de primaria, permitir el acceso por las tardes a las áreas verdes de los colegios, financiar proyectos pilotos que tengan en cuenta la perspectiva infantil en la creación de la ciudad, las voces crecientes en las agendas globales que ya abogan por parques infantiles para promover que los niños salgan al exterior.
Parques infantiles derecho de la infancia
El director ejecutivo de la Fundación LEGO afirmo en la última reunión del Foro Económico Mundial que el “56% de los niños y niñas del mundo pasa menos tiempo en exteriores que los prisioneros de máxima seguridad en EUA”. Es clara la necesidad de parques infantiles, porque aunque la infancia, incluso en situaciones adversas, encuentra espacios para jugar, debe existir un compromiso social que evite que el entorno inmediato genere obstáculos importantes para el disfrute del juego y el desarrollo de todo su potencial. Es necesario dejar atrás el modelo de la ciudad centrada en el coche en beneficio de una ciudad habitada por parques infantiles y áreas de esparcimiento que no dificulten la movilidad independiente de los niños y niñas ni reduzcan su capacidad para experimentar y explorar la ciudad.
Los parques infantiles son por tanto una oportunidad de cumplir con el derecho al juego de los niños y que los niños participen en su diseño ayuda a la hora de respetar sus derechos y libertades. Las empresas de mobiliario urbano como Forjas tenemos un compromiso con la infancia y debemos luchar contra las infraestructuras inadecuadas, la congestión vial, la carencia de espacios públicos e incluso la percepción del aumento de inseguridad para contribuir con nuestro granito de arena en la inserción de la niñez en la ciudad.
